Nuestras trufas Mágicas están criadas bajo circunstancias de extrema profesionalidad así como envasadas frescas y al vacío. Desde hace 21 años ininterrumpidamente se celebra en el pueblo de Abejar, a tan sólo 30 kilómetros de la ciudad de Soria, la que está considerada como la mejor Feria de Trufa Negra de España. No, no recomendamos que se vuelva a congelar la trufa que se haya descongelado por completo. No sé dónde te hallas, ni dónde te encontrará esta carta y las que le seguirán, si Dios me da vida y salud. Meter las trufas en una bolsa: las trufas deben estar dentro de una bolsa de congelación con cierre hermético (la típica bolsa zip). No tener guantes blancos, frescos como una lechuga, es una gran contrariedad, y puede ser causa de que el mancebo más cumplido pierda casamiento. La trufa es un ingrediente lujoso y costoso y no uno que deba congelar así como así.
Para empezar, el tratamiento requerirá que el can sea alimentado de manera directa con una dieta semilíquida. Debido a la naturaleza de las lesiones y al lamido del tratamiento tópico, puede llegar a ser una enfermedad de tratamiento frustante, que nos requerirá mucha paciencia y dedicación a los propietarios. Si planeas laminar o rallar las trufas durante una comida, es posible que no necesites descongelarlas en absoluto. Pero os aseguro que no he tenido la culpa de tardar tanto, y que al fin el día menos pensado iré. Si puede usarlas antes, experimentarás menos pérdida en el aroma y sabor distintivos. Puede congelar sus trufas frescas durante más o menos 1 año. Las trufas son muy escasas y la mayoría de los buscadores de trufas prefieren trabajar solos, sin embargo, a algunos buscadores les gusta ir acompañados por amantes de las trufas cuando van en su busca. Toma, por ejemplo, el cuento oriental de la prueba de las promesas; le naturaliza en Castilla; aprovecha la tradición de las escuelas de nigromancia de Toledo para dar color local al sabroso relato; describe con cuatro trazos firmes y sobrios el aula mágica («et entraron amos por una escalera de piedra muy bien labrada, et fueron descendiendo por ella muy grand pieza, en guisa que parescian tan bajos que pasaba el río Tajo sobre ellos; et desque fueron en cabo de la escalera fallaron una posada muy buena en una cámara mucho apuesta que y habia, do estaban los libros et el estudio en que habían de leer»); copia de la realidad contemporánea un deán de Santiago y un sabio de Toledo, que ciertamente no han pasado por Bagdad ni por el Cairo; les atribuye ambiciones y codicias enteramente propias de su estado y condición; prepara hábilmente los cinco rasgos de ingratitud, y no deja traslucir hasta el fin la clave fantástica envuelta en el convite de las perdices.
Á propósito de avestruz, después de haber recorrido la Europa y la América, de haber vivido como un mar qués en París y como un guaraní en el Paraguay; de haber comido mazamorra en el Río de la Plata, charquican en Chile, ostras en Nueva York, macarroni en Nápoles, trufas y setas secas en el Perigord, chipá en la Asunción-recuerdo que una de las grandes aspiraciones de tu vida era comer una tortilla de huevos de aquella ave pampeana en Nagüel Mapo, que quiere decir «Lugar del Tigre». En efecto: el abate de Bernis dictó al cardenal la respuesta para la margrave; era una negativa redonda a entrar en negociaciones. Las trufas tienen un sabor tan complejo que pueden combinar bien con una amplia variedad de alimentos y bebidas. Debido a su exclusividad y proceso de elaboración, el aceite de trufa blanca puede tener un costo elevado en comparación con otros aceites gourmet, pero su calidad y sabor único lo convierten en una inversión culinaria que vale la pena. Riquet, tu inútil agitación, tu importuno suspirar y tus ladridos son más propios de una cuadra que del estudio de un catedrático.